¿Estás perdiendo el tiempo? Mis síntomas del COVID-19 (2)

Llevo sintiéndome mal desde que empezó todo esto por lo que no estoy haciendo. Nos empapamos de millones de vidas virtuales a través de las redes sociales, sintiendo que la nuestra es un poquito peor. Sintiendo que estas perdiendo tu tiempo y que podrías aprovechar mucho más para hacer todo aquello que querías, cuando no podías.

Desde ahora reivindico lo que quiero hacer con mí confinamiento, y no por ello lo aprovecho menos, porque… ¿Qué es perder el tiempo?

Quiero levantarme sin despertador, disfrutar de ese momento que abres los ojos dejando pasar la luz del día sin pensar lo que viene después. Quiero que mi única motivación matutina sea ese desayuno tan rico que me voy a preparar. Quiero saborear la mermelada de melocotón y beberme a sorbitos mi café con leche de avena, dulce. Quiero morirme de amor cuando mi perra brinca por el campo, porque sabe que no hay horario de vuelta. Quiero que el sol marque en mi piel toda la ropa que llevo, y cerrar los ojos, para sentirlo.

Quiero que el corazón se me dispare cuando mi cuerpo se esfuerza. Quiero ponerme mi serie favorita y reír a carcajadas, y que esto dure toda la mañana, todo el día, sin remordimientos.

Quiero alimentarme de lo que me apetezca: pan, fresas, chocolate, aire, risas. Y pensar que tengo la suerte de volver a abastecerme cada vez que vaya a la cocina. Quiero sentarme en mi cárcel particular que tanta libertad me está dando. Leer entre las rejas de mi balcón, junto a mi gato. Contemplar desde ahí las calles, vacías, y el trocito de cielo que se me permite.

Quiero conversaciones infinitas y virtuales donde la imaginación vuele, para que el placer aparezca. Quiero que contagiarme de la energía que hay a través de una pantalla, porque ahora los cafés no solo se toman en el bar. Quiero revisar mi historial de WhatsApp y rescatar viejas amistades, crear nuevas.

Quiero escribir en mi sofá, hasta que me duela la espalda. Hacer mi clase de yoga, para compensar. Y que mi cuerpo me hable, que me diga que no puede más. Quiero tener tiempo para escucharlo y decidir qué es lo siguiente, sin plan, sin pensar.

Quiero soñar con nuevos proyectos y sentir el abismo de la inseguridad. Quiero que mi corazón se emocione por algo que todavía no es real. Quiero fardar de mi casa impecable, y que al minuto la tenga que volver a limpiar, porque la habito.

Quiero sentir, temer, amar, llorar. Quiero estar presente cuando transforme los miedos en inspiración. Que me pille sin nada que hacer, para poder sacar lo mejor. Quiero hundirme en eternos baños calientes, aborrecer canciones en bucle. Depilar mis cejas hasta que queden perfectas y pintarme las uñas para que nadie las vea.

Quiero pensar que esto se va a terminar y que no me voy a arrepentir. Quiero que el tiempo invertido no me lleve a ningún lugar. Quiero hacer lo que quiera, sin sentirme que lo hago todo mal.

Que nadie te diga que estas perdiendo el tiempo.